Utilizan una o más corazas separando el alma de la resistencia (parte interior) con espacios entre 1.5 cm. y 3.0 cm. entre ésta y la coraza, cerrando la parte superior de las mismas como se muestra en la gráfica y generando así una cavidad o volumen de aire apreciable entre la resistencia en sí y el medio ambiente que la rodea, con lo cual se consigue que casi toda la potencia producida por el elemento calefactor sea transmitida al cilindro y la cantidad de potencia que se radia al medio ambiente se reduce significativamente y teniendo en cuenta que el aire es un excelente aislante térmico, consigue ahorros de energía que oscilan entre 15 y el 35% dependiendo de cada elemento en particular.